La patronal CEOE niega que la reducción de la jornada laboral semanal hasta las 37,5 horas vaya a incrementar la productividad, como defiende el Ministerio de Trabajo, y apunta que, para que España tuviera una productividad similar a la media europea, su jornada efectiva debería situarse en el entorno de las 41,2 horas semanales.
