Las alarmas estaban encendidas desde hacía años entre los expertos, que ubicaban al borde del precipicio a los arrecifes de coral de las aguas cálidas, unos ricos y diversos ecosistemas de los que depende además la economía de millones de personas en el mundo. Y el momento de los “daños irreversibles” ha llegado. Debido al calentamiento global causado por el ser humano estos corales han alcanzado un punto de no retorno, según advierte un estudio internacional liderado por la Universidad de Exeter y el Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (PIK).
