El eco de la masiva protesta de miles de ciudadanos el jueves en Culiacán, Sinaloa, no llegó aún a Palacio Nacional. La presidenta Claudia Sheinbaum aprovechó la parte final de su conferencia diaria de este viernes, en la que explicaba los ejes de su estrategia de Seguridad en el país, para lamentar el asesinado de la familia Sarmiento Ruiz, el domingo, en la capital del Estado. “Por cierto, mi solidaridad por lo que pasó con la familia en Sinaloa. Le pedí a la secretaria Rosa Icela que entrara en contacto con ellos. Se hizo un refuerzo en Sinaloa hace unos días, y diario estamos revisando los resultados y avanzando. El secretario de Seguridad está ahí y va a seguir ahí”, dijo. Sobre la protesta en las calles en la que se pidió la renuncia del gobernador Rubén Rocha Moya al grito de “¡Fuera Rocha!”, y en la que niños y niñas marcharon vestidos de blanco entre llantos y gritos, no hubo comentarios.
